Hola a tod@s, mis queridos amigos.
Empezamos la semana a pie cambiado, pero seguro que al ver el video lo comprenderéis.
Sofía Sánchez, enfermera de la UCI del Hospital Son Llàtzer de Palma de Mallorca nos invita a la reflexión. No os lo perdáis, daos 4 minutos.

 

En julio de 2014 publicamos el post Abrazos y Corazones Sanos, presentando a raíz de una investigación el poder terapéutico de un abrazo.

Tras ver el video, se me ha planteado otra reflexión desde el punto de vista profesional. Y es que cada vez que interactuamos con nuestros pacientes y las familias algo pasa. Y entre los profesionales.

A veces nos toca contener tristeza, emoción, alegría, desesperación, soledad, esperanza. Y muchas veces nos toca abrazar esos sentimientos. Y sin duda, algo pasa en todos nosotros. Quizás va siendo hora de hablar de ello, de toda esa energía que tanto para lo bueno como para lo malo, vamos acumulando a través de los años en nuestra profesión, y que probablemente no sepamos manejar bien. Las personas  nos tocamos emocionalmente cuando interactuamos.
Quizás sea demasiado pensar que todo, incluso las guerras, se arreglan a base de abrazos. Pero desde luego, son una herramienta tan potente para quien busca el conflicto, que al final acaba cediendo. Y estoy seguro de que esa experiencia la hemos pasado todos.
No se puede rehuir ese calor, esas sensaciones, esas emociones. Hacen de nuestro trabajo un espacio único y maravilloso. Pero también hemos de cuidarnos.
¡Ah! Y no olvidemos abrazar a quienes tenemos al lado, acompañándonos y cuidándonos a nosotros.
Muchas gracias Sofía.
Feliz Martes,
Gabi