“La música es la medicina del alma” Platón

La música es un elemento inherente al ser humano, y nos ayuda a sobrellevar mejor situaciones complejas. Por poner un ejemplo, las melodías tienen una relación directa con nuestro cerebro, y estimulan la producción de las llamadas sustancias de la felicidad, como la serotonina, endorfina, dopamina, oxitocina y prolactina. La música también es  proveedora de emociones, por lo que juega un rol muy importante en nuestra sociedad. La música tiene la facultad de integrar todos nuestros aspectos, emocionales, físico, mentales, espirituales, fisiológicos y espirituales, y nos hace sentir, relajación, tristeza, rabia, alegría, entusiasmo…etc. Cuando no podemos, la música nos ayuda y nos ofrece un vehículo que nos da la oportunidad de expresar emociones e ideas, por algo a la música se le llama “el lenguaje de las emociones” (Winner, 1982).

Cuando comenzamos un tratamiento de musicoterapia para el estrés en profesionales de la salud, aplicamos la música para lograr cambios en la conducta aumentando la motivación y elevando el humor, influimos en la memoria y la capacidad intelectual, podemos inducir estados de relajación, e influimos en la memoria y capacidad intelectual, corroborando mediante la evidencia los efectos beneficiosos de la disminución del estrés y sus efectos. Es un método económico, no invasivo, simple, y con muy buena acogida.

Facilitamos que las personas puedan ser consientes de lo que sienten, asumirlo…y de esa manera poder expresarlo de manera creativa a través de la música…de su música. Todo eso es posible a las cualidades que nos ofrece la música para conectar con el interior de las personas. Como psicoterapia creativa, se toca y se canta más que se habla,  y la expresión verbal pasa a un segundo plano, o mejor dicho,a una segunda parte o fase. Una vez la expresión creativa, ya sea tocando o cantando,  nos ha permitido liberar y llegar al inconsciente y a nuestro sentir, la parte verbal se nos abre y se hace más fácil, y en ese momento tenemos nuestro espacio para analizar y compartir, aunque a veces después de expresarnos a través de nuestra música. No nos hace falta hablar, o no lo vemos necesario, ya que hemos llegado a una transformación interior.

Cuando trabajamos con música escuchada o que viene del exterior, también nos produce cambios a nivel fisiológico e influye en nuestro estado de ánimo, ya sea para activarnos o tranquilizarnos, pero es importante puntualizar que el impacto sobre las personas de la música escuchada no tiene la misma duración ni el mismo efecto, que cuando nosotros mismos somos creadores de la misma, ya sea creando nuestra propia música, o ayudando a otr@s a crear su música a través de instrumentos musicales o con nuestra propia voz. Cuando somos creadores generamos la verdadera transformación y los verdaderos cambios perdurables e importantes en nuestro interior,  en nosotros y en nuestro entorno.  Crear es sanar.

Es importante destacar siempre el trabajo grupal sobre el individual, ya que cuando escuchamos, tocamos y cantamos juntos,  nos abrimos a la convivencia y a la aceptación a sí mismo, a los que nos rodean y favorece la empatía ayudando a disminuir la ansiedad, y ofreciendo siempre un clima de sostén, despliegue y alianza

Todo este trabajo supervisado por profesional en Musicoterapia nos proporciona un bienestar emocional y espiritual con una calma duradera y sobretodo…nos da herramientas para podernos enfrentar a las situaciones estresantes, y cuidar a los que nos cuidan.

Objetivos Específico en sesiones de Musicoterapia y Bournout.

1. Dar herramientas y técnicas de autocuidado para el manejo del cansancio, estrés laboral,  y tensión.

2. Obtener recursos para la convivencia grupal; capacidad de escucha, manejo del clima emocional, aumentar la capacidad de tolerancia, flexibilidad y empatía.

3. Encontrar y reconocer la propia identidad: qué quiero, sueño, busco, y pienso.

4. Trabajar el autoconcepto y fortalecerlo, con el objeto de manejar situaciones de tensión física y psicológica .

Muchas fuerza y gracias a tod@s los profesionales sanitarios por vuestro trabajo, ahora nos toca cuidaros a vosotr@s.

Por Javier Alcántara.