“Un animal pequeño es a menudo un excelente compañero para los enfermos”
Florence Nightingale
Los animales han estado visitando hospitales desde principios del siglo XX para ayudar a los pacientes y familiares mientras están ingresados. La publicación del libro “Psicoterapia infantil asistida con animales” (Levinson, 1969) se considera el punto de inflexión en el desarrollo de programas de Intervención asistida con animales (IAA), denominada específicamente Terapia asistida con animales (TAA). Levinson fue el primero que describió en una monografía específica los procesos, beneficios y procedimientos asociados a este campo.
Desde que definiera este término para la comunidad científica moderna, numerosos estudios han corroborado que los animales tienen un enorme poder para estimular emocionalmente y para aumentar el grado de motivación del ser humano. La conciencia sobre los beneficios del vínculo humano-animal está aumentando debido a su implicación en la salud positiva del ser humano. El número de entornos sanitarios en los que se utiliza IAA está aumentando y las investigaciones han demostrado que las visitas de animales de terapia a los hospitales tienen un impacto positivo en los pacientes física y psicológicamente. El uso cada vez mayor de las plataformas de redes sociales ha permitido que las experiencias positivas de IAA para pacientes y familiares se compartan ampliamente. Esto ha facilitado la introducción de IAA en cuidados intensivos, con beneficios cada vez más positivos.
Existen muchos estudios que demuestran que tanto las intervenciones como las actividades asistidas por animales entrenados son beneficiosas para los pacientes y que la implementación, en UCI, de prácticas para la humanización de los cuidados mejora el perfil de hormonas de estrés y se apunta a que puede mejorar la gestión del delirium y procesos de destete, entre otros, y no incrementa la infección en el paciente. Estamos en una sociedad, dónde cada vez más, las personas tienen mascota y ésta es tratada como un miembro más de la familia. El vínculo entre mascota y paciente es más fuerte que el que puede existir con un animal entrenado, desconocido. Es por lo descrito anteriormente lo que nos motiva a introducir las visitas de las mascotas a los pacientes ingresados la UCI de la Clínica Diagonal como parte de la humanización en los cuidados y recuperación.
Por Ángela Tarongi
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