La nueva UCI del hospital Santa Caterina de Salt (Girona) ya es una realidad. Se ha creado con el objetivo de ofrecer una mejor atención a los pacientes críticos de toda la región, desdoblando la atención en dos niveles: El Santa Caterina atenderá a los enfermos críticos menos complejos en el nivel dos y la UCI del Hospital Josep Trueta de Girona atenderá a pacientes de nivel tres y que puedan presentar situaciones más delicadas. Ambas unidades estarán coordinadas por el Servicio de Medicina Intensiva del Trueta y compartirán sistema informático.

Esta unidad se ha creado partiendo de cero y el resultado es inmejorable: han creado una UCI con H.

Esta nueva HU-CI contará con una superficie total de 737,5 m2 y se ha construido en el sureste del hospital, junto al área quirúrgica y de urgencias. Los arquitectos y diseñadores de Vitaller Arquitectutra han proyectado la unidad basándose en estos conceptos principales:

Potenciando la privacidad del paciente, para ello han creado boxes individuales. Los ocho boxes con los que cuenta la unidad están separados entre si por tabiques y la separación entre el box y el pasillo es de vidrio. De esta forma se puede controlar al paciente y cuándo este requiera momentos de intimidad para el aseo, etc, el vidrio se vuelve opaco a través de unos vinilos electropolarizados para mantener la privacidad. Los boxes se han ubicado en el ala más luminosa de la fachada para aprovechar la luz natural. Cada box dispone de ventanas corridas con posibilidad de oscurecimiento y matización de la luz solar.

Pero, ya que hay ventanas panorámicas, sería fantástico que los pacientes  puedan disfrutar de las vistas, ¿no?. Pues en esta unidad es posible, han girado las camas 90º para que los pacientes puedan contemplar las vistas, así se cuida el ciclo día-noche para mantener el ritmo circadiano y la nueva posición de la cama aporta distracción y relajación al paciente. Para que este cambio de disposición no suponga un riesgo se ha instalado en cada box un sistema de vigilancia. Todos los boxes disponen de cámara de vídeo vigilancia gestionada desde el control, instalando monitores en el control y en la sala de descanso de personal. De esta forma el personal asegura una rápida actuación, en caso de urgencia.

También se ha proporcionado luz natural al espacio de trabajo del personal sanitario, instalando un lucernario en el control de enfermería.

En la construcción se han aprovechando los elementos separadores de espacios para que actúen también como aislantes acústicos y se ha reforzado el control del ruido con la instalación de sensores acústicos en el control. De esta forma se potencia el descanso y se reduce el estrés que el ruido provoca a los pacientes y al personal sanitario.

Estos conceptos principales se han completado con el diseño, materiales y la decoración para crear espacios más cercanos y acogedores. Se ha recurrido a colores relajantes, siendo el color blanco el que predomina ya que aporta luz y amplitud a los espacios.

La unión de todos estos elementos crean un ambiente confortable, de curación y humanizado para potenciar una pronta recuperación para el paciente.

Este proyecto está muy en la linea de las propuestas que Proyecto HU-CI propone en el Plan de Humanización de la Comunidad de Madrid que publicamos en 2016 y en nuestro libro Humanizando los Cuidados Intensivos. Es muy gratificante ver como se materializan proyectos con una filosofía común.

¡Enhorabuena por la nueva unidad, enhorabuena por la nueva HU-CI!

Por Mónica Ferrero